El pecho se tiene que dar
a demanda, es decir, sin horarios, ni tiempo de duración, se tiene que dar cuando quiera el bebé y todo el rato que quiera.
Mejor guardar el reloj o el móvil en el cajón de la mesita de noche.
Al principio es normal que las tomas no sean regulares: si entre una toma y otra pasan cuatro horas, estupendo, si entre una toma y otra pasan cuatro minutos, también es estupendo, si se me solapan las tomas pues es estupendo y normalísimo.
Claro, es estupendo pero también puede ser agotador, pues sí, lo es!. La lactancia aún no está instaurada: calma y descanso en la medida de lo posible, necesitáis tiempo para adaptaros (tu cuerpo y tus pechos también).
Si sucede que el bebé toma a cada momento o que las tomas son muy largas, es importante que la comadrona, pediatra o enfermera revisen la posición, agarre y succión para comprobar que todo es correcto. También puede pasar lo contrario y te parezca que tienes un “angelito” porque se pasa mucho durmiendo, también hay que consultar.
Con el tema de "a demanda" hay que tener en cuenta que en las primeras semanas algunos bebés no tienen la capacidad aún de regular su medio interno; en general un bebé debe mamar entre 8 y 10 veces al día por lo menos, si es más, mejor, así que si duerme mucho conviene ver si todo está bien, despertarlo, cogerle en brazos para ver si tiene ganas de mamar. No se puede “obligar” a dar el pecho, pero sí se puede animar…mucho piel con piel y mimos de mamá : )
"Asistir a algún grupo de apoyo a la lactancia también es muy recomendable. Otras madres con experiencia pueden ayudarte con las dudas y compartir estos momentos es muy agradable.
¿Cómo sabré cuándo quiere?
Pues lo mejor es tener a vuestro bebé el mayor tiempo posible bien cerquita para así estar atentos a las señales de que quiere mamar.
¿cuáles son esas señales?
en un recién nacido, estar despierto : ) Lo normal es que coman, hagan caca y duerman!
un aumento de la actividad,
movimientos de búsqueda cuando está en brazos,
sonidos, gorjeos suaves o suspiros, chasquidos de lengua y quejidos, abrir y cerrar la boca,
chuparse los puños,
Entonces, ¿no debo esperar a que llore?
Muchos padres creen que hay que esperar a que llore y esto es un error. Llorar es un signo tardío de hambre y al principio puede dificultar que el bebé se coja al pecho correctamente, el /la peque se pone nerviosa/o, nosotras y los padres también, le entra aire…, llora,... es por eso que es esencial sobre todo los primeros meses, tener a vuestro hijo/a cerca, si puede ser en brazos mejor, así os vais conociendo y aprendiendo sus muecas, sus gestos y, en poco tiempo, con sólo mirarles podréis intuir qué le pasa.
¿Cómo saber que ya tiene suficiente?
Lo más habitual es que cuando termine un pecho lo suelte espontáneamente y se quede tan ricamente. Siempre no pasa y algunas mamis me comentan “pero tengo la sensación que aún no había acabado”... Pues como ya hemos dicho, a un bebé no se le puede obligar a tomar pecho, así que si tenemos esa sensación, lo mejor sería ofrecerle otra vez ese pecho, si no lo quiere, será que ya había acabado y si sí lo quiere, perfecto, a esperar a que acabe. También hay que ofrecer al acabar un pecho el otro, que puede querer o no, y otra vez lo mismo...a esperar a que acabe.
A veces nos agobiamos un poco al principio pensando que no tendremos suficiente leche, que casi no sale calostro (la primera leche). Estos pensamientos no ayudan a que todo fluya. No es que me pongo mística tiene una explicación, la oxitocina que es la hormona encargada de provocar la contracción de las células para que la leche que se encuentra almacenada en los alveolos fluya y llene los conductos, produciendo el llamado «reflejo de eyección» o «reflejo de salida de la leche»
El reflejo de la oxitocina, ese eyectar la leche, se ve condicionado por las sensaciones, sentimientos y percepciones de la madre y, cuando éstas son negativas, como en situaciones de dolor o de emociones negativas, puede producirse una inhibición de la hormona que impide que la leche fluya adecuadamente, así que si estamos pensando que no tenemos suficiente leche: consultar a alguien con experiencia en lactancia y decirnos alto y claro:
Pues claro que tengo leche, por supuesto que tengo la leche
que necesita!!...
Repetir: tengo leche!! Tengo leche!!
porque es cierto!!
¿Cuánta leche debe tomar mi bebé?
Las canicas, el ping pong y el huevo! Si sí, ahora lo explico, es un ejemplo que abunda por internet y lo encuentro muy acertado:
Entre el primer y tercer día el tamaño del estómago de un bebé tiene una capacidad de entre 5 y 7 mililitros en cada toma, apenas cabe el contenido de una cucharada. Además el primer día no se puede estirar, no da más de si, así que no pueden tolerar más que esa cantidad, si intentamos dar más la regurgitaría porque literalmente no cabe, para ser más gráficos es igual a la cantidad de leche que entraría dentro de una canica.
Entre el tercer y décimo día el estómago va creciendo hasta tener una capacidad de entre 22 y 27 mililitros en cada toma (vendría a ser el tamaño de una pelota de ping pong). Tampoco es que sea mucho más pero tenemos lo suficiente, sólo que es comprensible que deba hacer muchas tomas pues en una sola ingesta no podría conseguir toda la energía y nutrientes que necesita.
A partir del décimo día el estómago pasa a tener la capacidad de entre 60 y 81 mililitros en cada toma, la leche que entraría en un huevo.
Después del primer día el estómago sí se estira así que si damos más leche de la necesaria “sí que cabe” (lo cuál no quiere decir que sí haga falta). La lactancia a demanda permite que regulen la cantidad que necesitan.
El estómago va a ir creciendo y también la producción de leche va a aumentar… Y como confiamos en nuestra capacidad de amamantar, pues nada, a disfrutar mucho porque el tiempo pasa más rápido de lo que nos pensamos : )
NOTA IMPORTANTE
Todos los contenidos publicados en esta web materlac.cat tienen un carácter puramente informativo y no sustituyen en ningún caso la consulta médica. Ante cualquier duda debéis consultar con el profesional sanitario de referencia.
Bibliografía
- Comité de Lactancia Materna de la Asociación Esàñola de Pediatría; Lactancia Materna: guía para profesionales; Madrid; Editorial Ergon, 2004
- Comité de Lactancia Materna de la Asociación Esàñola de Pediatría; Recomendaciones sobre Lactancia Materna; http://www.aeped.es/sites/default/files/201202-recomendaciones-lactancia-materna.pdf
- García Gabaldón, M.L, Renovell Giner, C; Protocolo de nutrición en el recién nacido. Consultado el 12/12/2014. http://www.enfervalencia.org/ei/82/articulos-cientificos/5.pdf
Comments