Una quemadura es una lesión a la piel u otro tejido orgánico causada principalmente por el calor o la radiación, la radioactividad, la electricidad, la fricción o el contacto con productos químicos.
Las quemaduras se clasifican en grados. Para valorar cualquier tipo de quemadura y decidir qué tratamiento es el adecuado se tienen en cuenta 4 factores: extensión, profundidad, localización y agente causante.
Algunas personas piensan que lo que determina la gravedad de la quemadura es el grado de ésta, pero es una combinación de estos cuatro elementos, junto con la edad y estado de salud antes de la quemadura.
Teniendo en cuenta todo esto decidiremos las curas que debemos realizar.
Por ejemplo, cuando se establece el grado de una quemadura se valora la profundidad en la que está afectada la piel, pero podemos tener una quemadura de tercer grado muy pequeña y una de segundo grado muy extensa, con lo que el segundo caso sería más grave.
TIPOS DE QUEMADURAS Y CAUSAS FRECUENTES QUE LAS PRODUCEN
o Quemaduras térmicas: son las más frecuentes (85% de los casos),
- por contacto, ocurren cuando la piel entra en contacto con cualquier fuente de calor, por contacto, la puerta del horno encendido, el radiador, la plancha de la ropa o del pelo, (que se mantienen calientes después de bastante tiempo de haberlas desenchufado),
- por escaldadura con un líquido caliente, derramar el té, café, un plato con la comida muy caliente, la olla o sartén en el fuego al agarrar el mango y tirársela por encima, o el peque le da una patada mientras porteas y le/os salpica.
o Quemaduras eléctricas: son las menos frecuentes, se producen por el paso de o de la corriente eléctrica a través del cuerpo, produciendo lo que se llama un choque eléctrico. Puede ser de alto o bajo voltaje. Pueden ocurrir al morder cables eléctricos o meter objetos en enchufes.
o Quemaduras químicas: producidas quemaduras por sustancias cáusticas. Ocurren al tragar o derramar sobre la piel líquidos de limpieza, lejía, amoniaco, productos para blanqueamiento dental, productos para cloración de piscinas, tragar una pila de botón. La gravedad, en estos casos, depende de la concentración y el tiempo de exposición.
o Quemaduras por radiación: producidas fundamentalmente por los rayos ultravioletas tras la exposición al sol.
Una vez sabemos cómo se ha producido y qué tipo de quemadura es, vamos a clasificarla, se clasifican por grados.
CLASIFICACIÓN DE LAS QUEMADURAS
La clasficación de la quemadura por grados depende de las capas de la piel que estén afectadas.
Quemadura de primer grado: son las más leves. Afectan sólo a la epidermis de la piel (capa más superficial) y se manifiestan en forma de eritema (enrojecimiento), la piel se ve roja y seca. Son dolorosas debido a la irritación de las terminaciones nerviosas sensitivas más finas que llegan a todos los rincones de la piel.
Quemadura de segundo grado superficial: afectan a la dermis y se caracterizan por la aparición de ampollas, son muy dolorosas. La piel se ve roja y húmeda.
Quemadura de segundo grado profundo: la lesión afecta a la dermis y llegan hasta la hipodermis El aspecto de la piel será de color es desparejo, de rojo pálido a marrón, con una textura seca y curtida. Causan poco dolor o son indoloras debido a la destrucción de las terminaciones nerviosas.
Quemadura de tercer grado: las más graves. Se afectan todas las capas de la piel y pueden llegar a extenderse al músculo o hueso subyacente. La piel se ve marrón negruzca, seca, carbonizada y casi siempre es indolora.
LO PRIMERO SIEMPRE ES PREVENCIÓN
Para proteger y prevenir las quemaduras es importante tomar algunas precauciones.
Las medidas de seguridad son necesarias para prevenir las quemaduras.
Mantener los cables eléctricos en buen estado, desechar los que estén dañados o desgastados.
Evitar usar alargaderas y evitar sobrecargar los enchufes con “ladrones” de corriente.
Si sobra cable de una lámpara atarlo para evitar que se pueda estirar del cable o pueda ser mordido. No dejar aparatos enchufados a la corriente (ojo: cargador del teléfono!)
En Navidad, asegurar que el cableado de luces no está roto por algún tramo.
Colocar los calefactores a un metro de las camas, cortinas o otros objetos inflamables.
No dejar velas encendidas al alcance. Apagarlas en el caso de tener que salir de la estancia dónde están.
Guardar mecheros, cerillas, petardos fuera del alcance.
Enseñar que los calefactores como estufas y radiadores pueden quemar y no deben tocarlos.
Enseñar que las planchas del pelo o la ropa pueden estar calientes después de usarlas, incluso si están desconectadas. 'Después de usarlas desconectar y enrollar el cable y almacenarlas fuera del alcance.
Mantener las sustancias químicas fuera del alcance y lejos de los alimentos y bebidas.
Usar las sustancias químicas dónde haya buena ventilación, o ventilar después de usarlas.
Mantener las bebidas y las comidas calientes fuera del alcance.
Colocar los mangos de las ollas y sartenes hacia la parte de dentro de la cocina.
No usar manteles que cuelguen para evitar que puedan estirarlos y derramar una bebida o plato caliente.
Probar siempre el agua de la bañera con el codo antes de meterlo. Colocarlos de espaldas a los grifos para evitar que abran el agua caliente por accidente.
En verano, proteger la piel de los niños de los rayos solares con cremas de filtros elevados.
Usar sombreros para proteger la cabeza del sol, sobretodo en los más pequeños.
Realizar un curso de primeros auxilios infantiles es muy recomendable. Aprender resucitación cardiopulmonar (RCP) y la maniobra de Heimlich.
TRATAMIENTO DE LAS QUEMADURAS
Algunas de las quemaduras las podemos tratar en casa, pero si tenéis alguna duda, es muy importante que consultes con tu enfermera o pediatra.
¿QUÉ DEBEMOS HACER ANTE UNA QUEMADURA INFANTIL?
o Retirar la fuente de calor.
Si está en el sol, ir un lugar con sombra.
Retirar la ropa que contiene el calor o algún producto químico mojándola previamente y retirándola con cuidado, si hace falta cortar la ropa para retirarla con cuidado, si está pegada no retirarla.
o Enfriar la quemadura con agua fresca durante 10 o 20 minutos, lo antes posible. Si ha salido una “ampolla” procurar que el chorro del agua no le caiga directamente para evitar que se rompa.
o Quitar anillos, pulseras, prendas apretadas sobre el área afectada
o En el caso de ser una quemadura de primer grado, hidratar la piel durante unos días. Las quemaduras de segundo grado necesitan desinfección y cubrirlas con una gasa (cómo si fuera una herida).
o Si la quemadura es muy extensa o profunda, sea del grado que sea, es de segundo grado, hay inhalación de humo, afectan a articulaciones, manos, pies, genitales o rostro, o es de tercer grado, avisar al 112 y seguir sus instrucciones.
¿QUÉ NO SE DEBE HACER EN UNA QUEMADURA INFANTIL?
o No aplicar hielo en la quemadura.
o No aplicar pasta de dientes, mantequilla ni otros remedios caseros.
o No se deben romper las ampollas.
o No retirar la ropa que esté pegada a la piel.
o No encender la luz si huele a gas.
o No dar leche ni provocar el vómito en caso de haber ingerido una sustancia tóxica.
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NOTA IMPORTANTE
El contenido de esta web complementa pero en ningún caso sustituye el trabajo de enfermería ni de otros profesionales de la salud. Ante cualquier duda debéis consultar con el profesional sanitario de referencia.
Bibliografía
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